Surgen los comentarios por todo el bosque de Selva, tras días de esperar la llegada del Invierno todo son preguntas acerca de su retraso.
El sol saca a pasear sus rayos que, sin hojas que le entorpezcan, interroga a los árboles acerca de lo que está pasando.
Los troncos cubiertos por espléndidos abrigos de musgo no dan crédito a este retraso.




Las aguas quietas y remansadas del Pozo de la Mina se vuelven espejos de la desnudez que viven las orillas y alguna hoja seca se baña aprovechando la buena temperatura.
El Parque vacío se cuestiona la ausencia de voces y de visitas, sin entender muy bien en qué fecha estamos. Sin embargo el calendario sigue a su bola y prosigue arrancando días y días que nos acercan a una primavera que no se sabe cómo vendrá vestida.



