Arbolillo que puede alcanzar 10 m. Hojas alternas, simples, perennes, duras, intensamente verdes y brillantes por el haz y algo más claras por el envés, de forma más o menos elíptica, y de contorno muy variable, desde completamente liso a provisto de fuertes dientes muy punzantes.
Especie dioica. Las florecitas son pequeñas, nacen en grupos en la base de las hojas, son de color amarillento o algo rosado. Las masculinas con 4 estambres y en su centro un pistilo mal desarrollado y estéril. Las femeninas llevan un pistilo rodeado de cuatro estambres mal desarrollados y también estériles.
Los frutos son esféricos, de menos de 1 cm de diámetro y de color rojo intenso con 3-5 huesecitos en su interior. Maduran en otoño y permanecen en el árbol durante buena parte del invierno, lo que da al acebo un llamativo aspecto que contrasta con el resto de la vegetación en estado invernal desprovista de hojas e incluso cubierta por la nieve.